LA JANDA
La antigua laguna de La Janda, desecada y destinada a favorecer la agricultura en los años sesenta, fue una de las lagunas más grandes e importantes de España.
Actualmente La Janda es un mosaico de diferentes cultivos de regadío y pastizales, que proporcionan alimento y descanso a infinidad aves.
La Janda es un lugar excepcional para observar aves durante todo el año, ya que alberga un gran número de especies residentes y otras que utilizan este espacio como una zona de invernada o como escala en sus migraciones.
En un buen día, no es raro ver más de 60-70 especies diferentes. Estas especies incluyen rapaces como el águila imperial ibérica, el águila perdicera, el elanio azul, los aguiluchos laguneros y cenizos o los mochuelos durante toda la época de cría y lechuzas campestres y los aguiluchos pálidos durante el invierno. De la misma manera, durante la época migratoria, La Janda es muy buen lugar para poder ver buenos bandos de halcón abejero, milanos negros, culebreras europeas y águilas calzadas.
Sus zonas inundadas son también especialmente buenas para albergar increíbles bandos de cigüeñas blancas que se alimentan y descansan antes de realizar el “gran salto” hacia el continente africano, aunque durante el invierno, los números más grandes en La Janda pertenecen a las grullas. Aquí, podrás ver casi 2.000 de estas aves alimentándose plácidamente en los campos de cultivo mientras esperas a la puesta del sol para escuchar su particular trompeteo antes de irse a dormir.
La observación de aves en La Janda no se limita a las aves de gran tamaño. Perdices, faisanes, la colonia de cría de garcillas y moritos, garcetas, calamones, martinetes, canasteras, sisones, garcetas, cucos, críalos, gorriones morunos y un sinfín de coloridos fringílidos harán de nuestro tour en la Janda un lugar que nunca olvidarás.
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